lunes, 28 de marzo de 2011

ELISA (CUENTO)

                                               POR MARÍA BAS


Elisa era
una niña de trece años.


Un día
salió a pasear y se le fue el santo al cielo, se le hizo de noche y de pronto
se encontró con un paisaje precioso las nubes se acercaban al suelo la luna
llena iluminaba todo, la niña se quedó estupefacta ante tanta belleza llevaba
el móvil e hizo una foto.


Cuando
llegó a su casa sus padres la regañaron, después de escuchar el “chaparrón”
sacó la foto y dijo mira papá lo que hecho y ya me dirás.


El padre
comprendió se lo enseñó a la madre, que también comprendió Elisa dijo tenéis
que venir a verlo al natural, iremos dijeron los padres.


Los padres
de Elisa al día siguiente selo enseñó a la profesora. La profesora dijo aremos
una excursión iremos toda la clase y los padres que quieran ir.


Todos
dijeron que si, se prepararon para el festejo. para el jueves    estamos a martes.


Efectivamente
el jueves se prepararon todos llevaron cena y cámaras de de fotos. Elisa estaba
muy contenta, eran las doce de la noche y todavía los niños y padres y la   profesora comían y seguían haciendo fotos,


Elisa dijo:
¿Por qué no presentamos las fotos en un concurso? Bueno dijeron todos.


Las fotos
fueron presentadas a un concurso, el primer premio lo ganó la madre, el segundo
lo ganó un compañero de clase. El tercero lo ganó la profesora desde entonces
en las noches de luna llena ese” sitio fue declarado patrimonio nacional  y llevaron allí a los turistas Elisa recogió
un premio especial.



jueves, 24 de marzo de 2011

LOS ESTRANJEROS

Madrid, España  1949- por radio se dio la noticia de que unos españoles  con niños pequeños iban a venir de Alemania.
La gente se preguntaba si la  embajada española se había enterado bien ya  que eran unos cuantos matrimonios.
La embajada, se dio por enterada y dio la noticia por radio; nos hemos enterado muy bien no solo hay que acogerles pues no son extranjeros son españoles y vuelven a su patria y serán recibidos con la marcha española y se les dará trabajo y una casa.
Vienen el jueves de la estación de Atocha.
Los españoles que  quieran pueden ir a recogerlos (la embajada) efectivamente el jueves a las 18 –horas  se vio que venía un tren que paró.
Lorenza que era una  buena moza bajo al andén y recogió a una niña de de meses   la tapó mejor y se la dio a la madre que también bajó.
Había autoridades y mucha gente eran dos vagones, llenos de gente las mujeres llevaron pañuelos en el pelo.
Esa noche durmieron todos en un hotel, Lorenza ayudó en lo que pudo.
Lorenza dijo: yo  me ocupo de “esto” extranjeros, y dale le replicó otro que no son extranjeros que son españoles, bueno pero no hablan bien el español así que para mí son extranjeros .
Los “extranjeros” dieron las gracias y luego más adelante se les proporciono casa y trabajo. Los extranjeros estaban encantados de estar en casa.
Lorenza se hizo amia del matrimonio y los extranjeros

martes, 22 de marzo de 2011

(LA TORTUGA) CUENTO

La tortuga Margarita era muy diligente, andaba muy deprisa.
Se enteró que en su barrio se iba a celebrar un campeonato de tortugas, Margarita  se apuntó  (se dijo para sí) con lo que yo ,corro , seguro que gano.
Llegó el día del concurso y todas las tortugas se pusieron en sus puestos de salida, Margarita estaba segura de que iba a ganar se escucho el disparo de salida y todas las tortugas salieron corriendo.
Margarita adelantaba a todas hasta que se dio cuenta que   un tortugo la      adelantaba su rival le dijo, tú te lo tienes muy creído Margarita, pero yo Filomeno te ganaré.
Margarita  molesta no quería escuchar , solo corría  faltaba muy poco para llegar a la meta, Margarita no veía a nadie cuando llegó a la meta vio que había llegado la tercera primero Filomeno, segundo Isidoro, y tercero Margarita se oyó por un altavoz los nombre de los ganadores Margarita lloraba por dentro pues había ganado pero había perdido.



EL LAPIZ (CUENTO)


EL lápiz era grande y Maribel  escribía con el pero al escribir y se iba gastando la mina, Maribel le sacaba punta pero cada vez se hacía más pequeño.
Maribel era muy aplicada y escribía mucho  pero el lápiz, empequeñecía y el lápiz lloraba porque se moría. El lápiz le dijo a Maribel coge otro lápiz porque me estas matando de tanto escribir conmigo.
Maribel no izo caso y el lápiz se murió. 

ABRIL POR MARÍA BAS ¨POESIA¨

Abril eres guapa
Eres rubia
Tus ojitos son... azules
Abril
Tú nombre significa
Primavera
Tú naciste.
Abril
Eres buena
Eres una linda muchachita
Y tú crecisteis y mujer te hiciste
Tú naciste.
Abril
Eres buena
Eres una linda muchachita
Y tú creciste y mujer te hiciste
Abril
Eres angelical
Y tus ojitos azules
Tú luciste
Son celestes
Tú te los hiciste
Te dibujaste…
Y te luciste.                   

lunes, 21 de marzo de 2011

LA PROFESORA

 La profesora, tenia sesenta años    era de un cursi que espantaba.
   Los niños la tenían manía, se llamaba Patricia “ella” decía que su nombre era de película y  que era de señorita, siempre decía que desde pequeña ya sabía que iba a ser profesora, pues el nombre lo daba.
  La profesora quería que la llamasen señorita profesora.
  Los niños no lo hacían ni caso, la profesora se pintaba mucho y decía
  que estaba en lo mejor de su vida, solterona jamás conoció amigos
  ni a ningún muchacho debido a su falta de madure y a su cursilería.
  Ella estaba orgullosa de sí misma, en la clase había un niño que se llamaba Pablo y era tan cursi como ella tenía dieciséis años  y era tan tonto que resultaba idiota admiraba profundamente a la profesora.
Pablito, decía ella sal al encerado y haz   los deberes para que todos vean como se hacen.
Pablito se lamentaba, hacia una reverencia a la profesora y se disponía a hacer los deberes. Eso enajenaba a los demás niños  y Pablito comenzaba diciendo: he sido el encargado por nuestra  bella profesora para que os enseñe.
Los chicos de la clase le llamaban de todo pero él no hacía caso, y comenzaba a hacer los deberes. Luego añadía podéis llevar los cuadernos  a la señorita doña Patricia, os tenéis que aplicar más, pues la señorita enseña muy bien. Un muchacho dijo perdón Pablo pero “esos” deberes están mal hechos, mira los míos están bien.
Pablito y la profesora le gritaban “burro” una equivocación la tiene
Cualquiera, una sí prosiguió el muchacho pero lo tuyo es a diario. Ya me tienes harto. Para mí la profesora ni tú sabéis nada eres de un cursi que debía tener tu profesora dieciséis años, o tú sesenta.
Pablito enrojeció, y la profesora también y Pablito dijo dejémoslo. El muchacho se fue otra vez a la dirección, la directora estaba hasta la coronilla del asunto, llamaré otra vez la atención a Pablito y a la profesora puedes irte.
La profesora no hacía caso y Pablito tampoco y el muchacho se cansó de ir a la dirección.
Cuando ya terminó el curso Eduardo, que a si se llamaba el muchacho vio el cielo  abierto porque pasaba al instituto y Pablito volvió a repetir.                         

 

LOS PENDIENTES


                 POR MARÍA BAS
                          Los pendientes son bonitos
                         Los largos y los hay cortos
                        Pero todos son pendientes
                        También hay “cosas” pendientes
                        Se los ponen las mujeres
                       Y también los hombres
                       Pueden ser de oro
                     O de bisutería
                     Que no harían las mujeres
                     Por tener pendientes
                     Los pendientes
                    Penden de la oreja
                    Que son como rejas
                    Los pendientes quedan bonitos
                    Colgando de las orejas
                     Los pendientes.

sábado, 19 de marzo de 2011

(DE YELI A SU PADRE)POESIA

Padre no te pongas así, conmigo
Porque padre yo estoy enfermo
Yo te quiero
Pero me pides
Cosas que no puedo
Pido tú compresión
Y no compasión
Yo si pudiera
Haría todo
Pero tú sabes
Que no puedo
Papa yo te quiero
Pero hay cosas que,
Por más que quiera
No puedo
Papa comprendemé
Y quiero que  en tú cumple años
Seas muy feliz
Tú hijo

ANTONIETA

Antonieta era una niña de ocho años y tenía dos hermanos más,
De catorce y doce.
La madre cuidaba muy bien a los hijos, el padre también.
Antonieta iba al colegio sacaba sobresaliente
Los padres y hermano le dieron muchos besos
Antonieta y sus hermanos eran felices, Antonieta le dijo a su mama
Quiero salir por ahí. La madre le dijo que le parecía bien,
le pregunto adonde quiere al cine, al parque de atracciones a merendar, tú me dirás…
Hay mama que buena eres yo con tal de salir contigo soy niña mejor del mundo, bueno Antonieta entonces daremos una vuelta.
Está bien mama yo me conformo, salió con su mama y se lo paso bien
Antonieta.

el muñeco


El muñeco era de tamaño mediano llevaba unos pantalones, azules y un jersey azul, también calcetines blancos y sandalias blancas. Era de porcelana tenia los ojitos marrones, la nariz era chata y la boquita bien formada, se ponía de pie y andaba.
El muñeco se llamaba Raúl
La propietaria se llamaba Isabel tenía el pelo rubio como Raúl, Isabel, jugaba con él.
Un día Isabel, no quería comer se fue a la habitación y ante el asombro de todos Raúl empezó andar solo y le dijo a Isabel, sabes tú eres muy buena y yo quiero que comas y  cogió la bandeja y le dio el pescado, Raúl también comió.
Raúl tenia vida, hasta hora me he mantenido callado pero los cuidados de Isabel me han hecho que me convirtiera en niño. Isabel le cogió en bracitos y lo besó y corrieron alegres. Raúl luego se lavo la carita y las manos y le dijo a Isabel que hiciera lo mismo y la niña obedeció.
Todos se extasiarón  de esta situación increíble
Raúl luego se sentó al lado de Isabel y a empezaron a jugar a las mamas.
Isabel tenía una habitación llena de muñecos y tenia Raúl su propia camita, que también a la misma vez había muchos muñecos, los cuidaba como lo hacían con él.
Los padres y hermanos y una tía se fueron de la habitación.
No podían creer  lo que estaba pasando.
Raúl se hizo niño pero solo hablaba lo suficiente porque Raúl quería seguir siendo muñeco porque así el se sentía feliz
Isabel hacia los deberes y Raúl también a prendía.
Isabel, se bañaba todos los días y Raúl también que a la misma vez que lo hacía, con los otros muñecos.
La habitación de Isabel ella antes de irse al colegio. Raúl, esperaba a que Isabel, volviera comía siempre en su habitación y Raúl hacia lo mismo, luego  se echaba una pequeña siesta, antes se lavaba los dientes y Raúl igual.
La niña volvía al colegio y Raúl, esperaba tranquilo a que regresaba, su amita. La habitación siempre estaba limpia y Raúl sentado en el suelo o en un sillón de mimbre que tenía en el Isabel.
Los días pasaron los años también y Raúl se quedo en muñeco el preferido de de Isabel, que se convirtió en mujer.

EL PAYASO


El payaso se llamaba Jumerte.  Su nombre era Manolo.
Jumerte vivía solo, tenía una casa muy bonita espaciosa
Y cómoda, pero Jumerte  llegaba a su casa   y se echaba a llorar.
Vivía  solo, no tenía amigos, Jumerte era feliz en el circo.
Un día se le acercó un perrito blanco y negro que se llamaba Humberto.
Humberto, le acompañó a su casa entró y fue por sus zapatillas, Jumerte
Se sentó   en su sillón y dijo a Humberto que le dejase  sus zapatillas   al
Lado, Jumerte se las puso y dejó que el perro se llevase sus zapatos
A su dormitorio, luego Jumerte hizo la cena también se la dio a   Humberto que comió copiosamente y Jumerte empezó a ser feliz.
Jumerte estaba deseando volver al circo. Un día Humberto le dijo mira       
Ese pajarito cógelo  y le llevaremos a casa, el perro obedeció, se llevo al canario que no hacía más que cantar, Jumerte le compro una jaula bonita y le dijo al pájaro te voy a llamar Alioli. Y le gusto el nombre ya en Alioli, Humberto y Jumerte eran felices.
Jumerte les dijo mañana os llevare al circo para que veáis a los niños reír con mi actuación, al día siguiente Jumerte se los llevó, al terminar su trabajo todos se pusieron   de pie Humberto también y aplaudía, Alioli se puso a cantar como nunca.
Jumerte fue tan feliz que hasta lloró.
Ya en casa los tres    siguieron riendo y Jumerte ya no quería llamarse Manolo.
Jumerte ya tenía amigos que le fieles.
Los tres fueron felices para siempre.                                         

EL JARRON


EL jarrón era pequeño de mesa del salón tenia hojas verdes era también dorado, y tenía los brazos también dorados estaba encima de una mesa de cristal era muy bonito, la peana era también dorada   tenia hojas  verdes había estado en otros sitios, pero la dueña de la casa vio el sitio ideal y lo dejó allí, el jarroncito agradecido pues se veía  bien pues quedaba bonito, estaba encima de un paño blanco y al lado de  una figura blanca.
El jarroncito estaba contento pues al otro lado había un zapatito rojo y hacia contraste, el jarrón estaba visible y era de nácar y tenía el cuello dorado como las asas y la peana.